Últimamente no estoy compartiendo con vosotros mi trabajo, pues casi todas mis sesiones están vinculadas a un libro que se publicará en dos años y cuyas fotos evidentemente no pueden desvelarse hasta entonces.
Aun así consigo colar alguna sesión de cliente entre medias, como este precioso bebé de 5 meses. Un bebé de lo más risueño y rollizo. Sólo quería tenerle en brazos y achucharle, pero me contuve. Bueno, algún achuchón cayó pero al ver las fotos comprenderéis que era inevitable.